Chiang Rai II
Antes de irnos al hotel a dormir nos dimos un paseo por las afueras de Chiang rai con la intención de pasar por un puente colgante de madera que suponíamos cerca. Pateando pateando nos alejamos y llegamos a un parque abandonado que debió ser una base militar, teniendo en cuenta las esculturas de los soldados que flanqueaban la entrada y la pista americana que se veía al fondo. Paseamos hasta que nos dimos cuenta de que habíamos hecho un lazo para volver al mismo sitio. Una pena porque el puente no apareció y la caminata no había dado los frutos deseados, pero como Zarra es un artista, desapareció y nos volvió con la propuesta de hacer un paseo en barca. Resulta que había visto una cabaña de madera con alguna persona merodeando cerca del rio y le preguntó si nos podía dar un paseo. Acordaron el precio y nos lo propuso. Aceptamos. Volvimos sobre nuestros pasos y entramos en la cabaña en la que vivía una familia entre pollos, gatos y perros. Cruzamos la casa y bajamos por una espuenda...